Tignamar, Livilcar, Putre, Belén y Chapiquiña, entre otros, recibieron este adelanto de voz y datos, lo que beneficiará a personas que en su mayoría nunca se habían podido comunicar directamente desde los lugares en que habitan.
CONEXION
Se completó la fase final del programa “Conectando Chile”, que entregó conectividad a 16 localidades aisladas y también a cuatro escuelas de la región.
Pueblos como Tignamar, Livilcar, Putre, Belén y Chapiquiña, entre otros, recibieron conectividad de voz y datos, lo que beneficiará a personas que en su mayoría nunca se habían podido comunicar directamente desde los lugares en que habitan.
“La gente está muy agradecida con la llegada de la señal. Esto me ha servido para comunicarme con mi familia y poder organizarme con ella. De cierta forma, la conectividad nos ayudó a todos a ordenar un poco nuestras vidas”, dijo Yatiri Quiliri, de Putre.
En total, el programa entregó telefonía e internet móvil a 708 localidades aisladas de todas las regiones del país. Además, como parte de este proyecto, también se cubrieron 373 kilómetros de carretera, lo que contribuye a mejorar la seguridad en las vías, y se conectaron 212 escuelas rurales.
Este proyecto, que comenzó en 2014 y acaba de concluir, tuvo dos etapas: la primera consistió en conectar 181 localidades aisladas de todo Chile bajo la contraprestación del espectro de la banda 2.600 MHz, mientras que la segunda etapa comenzó en el 2015, llevó conectividad a otras 527 zonas con la contraprestación del espectro de la banda 700 MHz. Ambas fases significaron una inversión total de USD$ 218 millones.