El Arzobispo de Santiago, monseñor Celestino Aós, informó de una serie de disposiciones para las celebraciones de Semana Santa, entre el 5 y 12 de abril próximos. Las medidas son una forma de ayudar a la prevención del contagio de COVID-19.
Entre otras disposiciones, se encuentran las siguientes:
– Ninguna celebración contará con presencia de fieles.
– Las celebraciones litúrgicas deberán seguirse a través de plataformas que permitan sus transmisiones (en directo, no grabadas).
Con respecto a la celebración de Domingo de Ramos, en la Pasión del Señor, se invita a las familias a que confeccionen un ramo en sus casas.
El día Viernes Santo, en la liturgia de la Pasión del Señor, se pide una especial oración por los enfermos, por los que han sufrido y por el personal sanitario que a diario trabaja para la superación de esta crisis.
Las procesiones, representaciones de la pasión etcétera, quedan suprimidas.
En la Vigilia Pascual de la Noche Santa, durante la liturgia bautismal, no habrá bautismos, ni bendición de la fuente ni aspersión de agua.
El Domingo de Pascua de la Resurrección del Señor se celebrará sin presencia de fieles en el templo.
No se celebrará la fiesta y procesión del Cuasimodo.
Las residencias sacerdotales, los monasterios y comunidades religiosas, deben atenerse a las indicaciones de la Santa Sede.
Uniéndonos a la plegaria y mensaje del Papa Francisco “Invitemos a Jesús a la barca de nuestra vida” pues “Tenemos un ancla: en su Cruz hemos sido salvados. Tenemos un timón: en su Cruz hemos sido rescatados. Tenemos una esperanza: en su Cruz hemos sido sanados y abrazados para que nadie ni nada nos separe de su amor redentor”.